La importancia de hidratarse antes y después del ejercicio

La importancia de hidratarse antes y después del ejercicio

Un estilo de vida saludable debe incluir un poco de ejercicio. Además de una buena hidratación. El agua es lo mejor que puedes tomar, pero si está enriquecida los beneficios serán mayores.

Cuando se habla de nutrición es habitual pasar por alto la hidratación. Todos sabemos que es necesario beber 2 litros de líquido al día, a ser posible de agua u otras bebidas saludables. En caso de hacer ejercicio, la hidratación es necesaria antes y después.

¿Por qué es importante la hidratación cuando nos ejercitamos?

Todos hemos escuchado muchas veces que la mayor parte del cuerpo está compuesta de agua. En realidad, ese porcentaje varía en función de la edad. En el caso de los fetos es el 100%, y en las personas ancianas se reduce al 50%. Durante la edad adulta suele rondar el 60%. En el ejercicio, el cuerpo va perdiendo parte del agua a través del sudor. Por eso es necesario reponerla.

Los motivos son varios, aunque se pueden reducir a uno: es clave para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. El agua se encarga del transporte de glucosa, del oxígeno y de las grasas que necesitan los músculos para su funcionamiento. Al mismo tiempo, se ocupa de retirar el ácido láctico, el dióxido de carbono y otros productos metabólicos.

La importancia de hidratarse antes y después del ejercicio

Pero mientras estamos haciendo ejercicio, el agua también absorbe el calor que generan los músculos. Es decir, actúa como refrigerante. Se encarga de eliminar ese calor mediante el sudor. El resultado es que nuestra temperatura corporal se mantiene equilibrada.

Otras de las funciones que desempeña es la de lubricar las articulaciones, algo básico para el ejercicio del deporte. Además, protege los tejidos y los órganos, y es una herramienta muy útil para hacer la digestión, por las secreciones gástricas y el contenido en la saliva.

Formas de hidratarse correctamente

La mejor manera de hidratarse es bebiendo agua simple. ¿Cómo sabremos si estamos bien hidratados? El color de la orina nos da las pistas, cuanto más transparente mejor será nuestra hidratación.

Antes de hacer ejercicio se recomienda que estemos bien hidratados unas 4 horas antes de empezar su práctica. Un cálculo sencillo es considerar que debemos tomar entre 5 y 7 mililitros por cada kilo de peso. Las bebidas con sodio ayudan a estimular la sed y a retener líquidos.

La importancia de hidratarse antes y después del ejercicio

Durante el ejercicio es importante evitar la deshidratación, que aparece si perdemos algo más del 2% de nuestro peso corporal. Bebidas con sodio, potasio y carbohidratos son una gran ayuda.

El ejercicio es una de las mejores herramientas para mantener nuestro cuerpo en perfecto estado. Si quieres llevar un estilo de vida saludable no olvides introducir unos minutos al día. Pero recuerda también que la alimentación y la hidratación es clave. Tu cuerpo te lo agradecerá.