Los hábitos de vida saludable cobran presencia en nuestra sociedad, cada vez más concienciada. Cuidar la alimentación es fundamental pero no es tan sencillo como parece.

Una alimentación saludable es la que permite a nuestro organismo un funcionamiento adecuado y asegura el desarrollo y crecimiento optimo en todas las etapas de la vida.

Combinar una dieta sana con otros hábitos de vida saludable como la practica habitual del ejercicio físico y cuidar la calidad del sueño son las claves fundamentales para cuidar nuestro cuerpo.

Para conseguir el objetivo de tener un estilo de vida saludable, debes seguir estos consejos:

• Variedad de alimentos.

La variedad de nutrientes se obtiene comiendo todo tipo de alimentos. Se han de añadir de todos los grupos (cereales, frutas, hortalizas, aceites, lácteos, etc) ya que ningún alimento contiene por sí mismo todos los nutrientes necesarios.

• Comer más frutas y verduras.

Se deben de aumentar los alimentos de origen vegetal en nuestra alimentación y reducir los de origen animal. Un claro ejemplo, es la dieta mediterránea, que promueve el consumo de cereales, frutas, verduras, hortalizas y legumbres, fibra etc. También incluye los pescados, el aceite de oliva y la ingesta moderada de carnes y de grasa de origen animal.

• Proporción adecuada de cada alimento.

Es importante comer de todo, pero también saber cuáles son las proporciones adecuadas de cada alimento. La Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc) sugiere esta guía:

• Cinco comidas al día.

Otra de las claves de una dieta sana es realizar 5 comidas al día: desayuno, tentempié, comida, merienda y cena.

• Buena cantidad de líquidos.

El consumo de agua es imprescindible para tener un estilo de vida saludable y para el mantenimiento de la vida. El consumo recomendable es de 1 0 2 litros al día, lo que sería entre 4 y 8 vasos aproximadamente.